Beelzebub 43-72 La pandi unida


Más de un año ya tiene Beelzebub. Y de qué forma lo cumplió en el capítulo 56... Con mejor salud que nunca.

Como siempre, dejé unos cuantos capítulos para poder leer más de golpe. Y así ha sido, tanto que he podido leer parte de 3 sagas. Poco a poco son más extensas, pero aún alguna de ellas se me hizo corta.

Por fin acabó la saga de los doctores en la Tierra. Vinieron a curar a Beel, ahora toman rumbo al infierno, pero por cosas del destino, acaban arrastrando a Oga, al niño y al rubito Furuichi al infierno. Allí tendrán que buscar Alaindelon para volver. Saga interesante pero algo corta y con poca profundidad, la verdad. De todas maneras, a estas alturas yo no habría llevado a los personajes al infierno todavía. Me hubiera esperado un poco más adelante. La curisidad, ver a Beel grande cual héroe japonés luchando contra Godzilla.

Y cuando finaliza, empieza la que para mí está siendo una de las mejores. La saga del cole pijillo. Meten a todos los matones en la misma clase, da igual el nivel,  de un colegio pijillo, ya que el Ishiyama sigue destruido. Allí un nuevo personaje flojucho, Kazu, quiere que Oga sea su maestro. Al principio dice que no, pero Oga es un poco Chopper en este caso, y le gusta que le digan cosas buenas.

Por otra parte, Reina declara que está enamorada de Oga. Y cree que Hilda es su novia o mujer. Triángulo amoroso a la vista. Lo malo de todo esto es que Reina ha perdido parte del potencial que tenía. Antes daba miedo y era muy fuerte. Ahora que ha quedado más como una cabeza sensata que como un personaje preparado para luchar.


¿Cómo se iban a librar de batallas? Ni estando en un colegio de pijos. Los Rokkisei, un grupo de 6 alumnos expertos en deportes a los que parece molestarles la presencia de todos los matones, se ponen como objetivo expulsarles. ¿Cómo? Provocándoles y picándoles a luchar. Así les ponen contra las cuerdas. Tensa batalla en la que se enfrentan todos en un duro combate. Incluso Toujou asiste. El caso es que APLAUSOS para el autor por resolver el problema de una forma poco evidente en este título: deporte.

Campeonato de Volley. Pero claro, bastante especial debido a los personajes que participan.

En medio de todo esto, flascback para contarlos la historia de Oga, Furuchi y uno de los Rokkisei, Miki, que fue amigo de ellos cuando eran jovencitos. Un flashback algo corto, y es que es malo acostumbrarse a las características de otros mangas... luego exiges demasiado a los demás. Flashback que nos presenta a un enemigo que parece que en el capítulo 72 aparece para liarla parda. O para cobrar de lo lindo. No sabe dónde se mete.

Reseña muy larga, pero sólo diré una cosa más: OLE POR EL AUTOR POR NO USAR LOS PODERES DE BEELZEBUB COMO POWER UP EN ESTA ÚLTIMA SAGA. No pegaría ni con cola. Oga no ganaría contra estos pandilleros usando al bebé. Pero sería lo más evidente que pasara en un manga de este tipo. 


Me está gustando. Y es que juega perfectamente con los combates y con las coñas. Por ejemplo, que Oga y Toujou pase lo que pase siempre quieran inflarse a hostias, aunque estén en el mismo bando, mete un punto de coña a las batallas serias. Incluso el autor ha metido gente haciendo cosplays de Sket Dance o Psyren, dos de las 'nuevas' que siguen con salud en la revista. Estos pequeños detalles son los que, como dije hace tiempo, acaban haciendo que un manga sea interesante. 

Ha cumplido el año. No me ha defraudado.Lo quiero.

1 comentarios:

eter dijo...

Uno de mis mangas favoritos en la actualidad.

La saga de Toujou pintaba mal por la degeneración de hostias sin mucha gracia en la que cayó, pero luego el manga remontó de sobremanera.

"Regresaron" a tiempo del infierno y fue como un prólogo divertido a lo que vendra, pero la serie se mantiene en un nivel principalmente cómico con esa parida de clase que se han sacado.

Furuichi mola a cada escena que le dejan robar. Kunieda gana peso en la serie, y a pesar del aire tsundere brutal que tiene aún parece ser bastante fuerte. Y Toujou se ha unido como broncas.

Genial la idea del partido de volleyball y, me gusto aún más, como solventaron la trifulca anterior (sin humillar ni a Toujou ni a Kunieda, que sería la facil para decir "cuidado, estos pijitos son fuertes").

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