Bakuman #17 Jugando con el lector

Me encanta cómo el guionista juega con nosotros.

Bueno, empezamos por lo que importa de este tomo, que es la resurrección de Nanamine en las vidas de los personajes que trabajan en la Jump y de cómo quiere volverse a colar en la revista. Y gracias a esto todo el todo tiene razón de ser, pues todo gira en torno a este tema.

¿Por qué digo que el autor juega con nosotros? Bueno, en tomos anteriores ya nos lo ha demostrado, y lo que hace hacer a los protagonistas, lo hace él con él mismo en su obra, que leemos nosotros. Esta vez toca hacerles buscar en todo PCP algo que de sentido a lo actual que van a dibujar, así como Ohba usa todas las obras que han creado los personajes para crear lo nuevo, justo en el punto en el que nosotros estamos leyendo. Sigo pensando que Bakuman es un manga que sirve para que los lectores experimenten muchos trucos que los protagonistas nombran en el manga y que luego Ohba y Obata los ponen en práctica (recuerdo especialmente lo de "humor serio" cuando ambos dos perseguían a su editor, que en verdad hacía gracia siendo serio).

Y al final, su nueva obra. Una mezcla entre Death Note y Zetman.

¡No queda nada!