Así comienza... Scott Pilgrim

Un chaval de 23 años. Un grupo de música. Una novia china que va al instituto. Un amigo gay con el que vive (y duerme) y una obsesión: una chica que se le aparece en sueños. El caso, es que un buen día, ¡la conoce en persona! Y a partir de aquí, si quiere tener lo que quiere, tendrá que luchar, y muy duro, contra 6 ó 7 personas... no se sabe.

¿Pero esto qué es? Tan pronto parece un cómic absurdo costumbrista como que.... ¡se ponen a luchar! Que ida de olla! ¿Y que la mitad de las preguntas que se hagan los personajes no se responda y se pierdan en el limbo? ¿Qué me decís a eso? Que es absolutamente genial. Tan real, como la vida misma (lo de las preguntas, los desvaríos al hablar y demás, no ponerte a luchar) Igual de real que las tonterías que dicen... es que, de verdad, los diálogos para mi, son el punto fuerte.

Gráficamente... curioso. Un look muy a lo 'Supernenas' que funciona a la perfección con lo alocado y desenfadado de la historia. A veces parece algo simple, pero si te fijas, no le falta detalle.

Y en cuanto a los personajes... pues como en todas las historias, unos mejores que otros. Scott es... una persona que todos querríamos tener por amigo. Despreocupado, algo despistado, y no sabe muy bien lo que quiere, pero con un carisma y una forma de ser que, por mucho que se pueda aprovechar de sus amigos (Wallace en este caso) no se lo echen a la cara. Mención especial, Wallace, el amigo con el que vive, mucho más maduro, enigmático y directo. Un verdadero apoyo para el despistado protagonista. Y ahí queda el, para mi, el tercer mejor personaje, la propia Ramona... es MUY extraña, y si Scott es raro... ella lo es más.

Prueba algo diferente. Dale una oportunidad.