Cuando me hice con este manga fue un poco por curiosidad y con algo de reticencia, ya que me parecía que tenía un precio algo superior a lo que debiera (aunque por texto imagino que de ahí vendrá el precio). Menos mal que me lo pillé.
Ichi Efu no nos narra una historia elaborada y pensada para triunfar. Este manga es una obra documental en la que uno de los trabajadores en las tareas de desmantelamiento de la central Fukushima I, desde que se apuntó para ir a trabajar allí, pasando por los primeros trabajos que hacía hasta las cosas más íntimas de los trabajadores cómo dónde y cómo hacen sus necesidades, pensamientos y miedos.
No sé si es que soy muy cotilla, morboso (como el protagonista) o qué, pero me ha parecido la mar de interesante, y me lo he leído sin darme cuenta. Multitud de datos e información sobre cómo iba la central de energía, lo que pasó tras el terremoto y el tsunami, cómo trabajan, los controles de seguridad, cómo conviven los trabajadores con la amenaza constante de la radiación, etc.
Lo dicho, un documental para no dormirse la siesta.
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