Así comienza... Platinum End

"La vida de Mirai Kakehashi es tan mísera que este, presa del desánimo por haber perdido a su familia y por ser acosado por sus tíos y sus compañeros de clase, decide suicidarse. Sin embargo, lo que debería ser su final se convertirá en un nuevo principio en el que tendrá la oportunidad de convertirse en el nuevo Dios… si consigue sobrevivir"

Y así comienza este híbrido de Mirai Nikki y Death Note: con unos aspirantes a Dios intentando matarse (o no) y cada uno de ellos "ayudado" o tutorizado por un shiniga... ángel (o "shinigángel, como les llamo yo) con el típico dibujo de Obata.

Tengo que reconocer que me la esperaba peor. Porque este duo de autores aunque hagan una foto de una mierda y la publiquen, la van a vender bien, no tienen que esforzarse mucho. Y por comentarios leídos por el vasto internet. Y me ha sorprendido su lectura y me he sorprendido leyéndomelo de una sentada (algo que hoy día es casi casi impensable para mí) a pesar de ese constante dejavu que he tenido con Mirai y con Death Note.

Puntos negativos... el protagonista, que es insípido como él solo y su ángel, que parece una loca.

¡Por cierto! La edición es la típica de Norma, pero la portada tiene un efecto muy bonito... que empaña el arte de la misma, apagándola mucho y haciendo casi imposible verla bien, hay que jugar un poco con los ángulos para ver el dibujo... pero bueno... es lo que hay.